Hoy regreso a mi casa enojado, molesto, desesperado y asustado. Yo se el porque. Y como dice una amiga, a la que parece que no enfado cuando le platico de lo mismo, no me puedo hacer pendejo, la respuesta y la solución la tengo yo y nadie más. La vida me ha enseñado algo, y los últimos acontecimientos me han permitido empezar con un examen de conciencia a fondo. He encontrado muchos errores, pero ninguno que no se pueda cambiar. Si quiero hacer bien las cosas tengo toda la capacidad, y a pesar de que muchas personas a mi alrededor lo duden, se que tengo mucho que ofrecer, tal vez no económico, pero sí personal. El día que pueda ofrecerle lo que tengo y esté dispuesta a aceptarlo como es todo será mejor para ambos, solo quiero esa oportunidad de hacerlo. Encontrar en sus ojos y en sus palabras una puerta, ventana, agujero abierto para entrar. Estoy consiente de que he cometido errores, pero al mismo tiempo necesito esa confianza para mejorarlos.
No soporto la música de banda. Hace rato que me tiene cansado, llena de frases huecas, música al hay se va. Creo que se han de juntar a pistear un viernes y dicen: hay que grabar un disco, orale, y el domingo ya lo tienen nuevecito y a la venta. Pero encontré una canción de un tal Mariano Barba, que vaya, para ser sincero tiene una canción que se llama una noche más y la misma tiene un significado muy importante para mí. Esta nueva canción que el día de hoy, hace no muchos minutos, escuche por primera vez, tiene un nombre sugerente: punto g. Pero al escucharla me llegó bastante. Algunos sabrán porque, a los que no les pediré que no pregunten, pero me imaginé tantas cosas con una mujer. Una mujer a la que he hecho sufrir demasiado, pero aún sigue conmigo, esa mujer a la que estoy dispuesto a entregarle lo poco que tengo y lo mucho que soy, pero que me tiene miedo, que no puede confiar en mí. Ojalá haya una oportunidad. Yo solo espero no hacerla sufrir más y esa es mi meta a partir de este preciso instante. Si hay tiempo perfecto yo seré feliz y me lo sabré ganar día a día, si no lo hay para mí, si ya está cansada de soportarme y de creerme y de esperar de mí, que no pierda más el tiempo conmigo y busque su felicidad. Pero a partir de este momento, de este día, de este instante, O ES TODO O NADA.
Y muchos lo han escuchado de mi boca, si no es aquí, no será en ningún otro lado y queda por escrito en este BLOG que es tan importante para mí.
Hay les va el video y que Dios me perdone por subir banda a este espacio.
lunes, 23 de marzo de 2009
jueves, 19 de marzo de 2009
Bendita Normal Superior
Hoy no puedo concentrarme en hacer más tarea, pasa de la una de la mañana, llevo despierto desde las 8. Primero trabajo frustrante en la oficina, trámites y más trámites de créditos. Y después de soportar la mañana llena de tensión, groserías, altanerías, burocracias y bueno, vaya, uno que otro merecido agradecimiento llegas a la escuela, a mi "querida" Escuela Normal Superior de Jalisco.
La verdad no se que es lo que pasa. En verdad que amo mi profesión. Siento un gran cariño y profundo respeto por ella y bajo este tenor siento terror al observar a las futuras generaciones de docentes que egresarán y desgraciadamente han egresado en los últimos años de esta institución. La gran mayoría autómatas. Cada semestre te llenan la mochila o el carro de paja y más paja. Antologías de más de 500 páginas por materia, las cuáles debes de leer y "analizar". ¿En verdad creen que con esto seremos buenos docentes? Ja, que engañados vivimos. Tenemos que cumplir con "ciertos requisitos" para llegar a tener un título como Lic. en Educación Secundaria. Pura y vulgar parafernalia. No se quieren dar cuenta que nuestros gobernantes no desean "maestros", lo que buscan son borregos destinados a la hoguera. Personas sin actitud, sin capacidad de réplica, que no se quejen, que soporten las injusticias, que sientan TEMOR de expresar sus opiniones, que no puedan defender su persona ante la opinión pública. ¿Para qué preparar docentes para la educación pública si esta está destinada a desaparecer?. Preferible que los futuros docentes sean callados y sumisos y en un futuro que esto llegue a suceder simplemente tomen su tabla y se dejen llevar, flotando plácidamente, por la corriente.
¿Saben? felicidades, lo están consiguiendo. Es triste, después de 9 años de trabajo frente a las aulas con nombramiento en la educación pública y algunos más fuera de ella, contabilizando un total de 12, observar como personas sin experiencia vienen a ofrecerte las tablas para ser un gran docente. No se pueden poner de acuerdo en las partes de un ensayo, no te saben explicar lo que es en verdad el constructivismo y además ni siquiera lo usan o lo confunden con "ahí les va la paja, expongan frente a grupo". Claro, no quiero ni busco generalizar. Siempre he tratado de diferenciar y separar lo bueno de lo malo. Hay maestros y maestras que valen la pena en esa escuela. Sus capacidades son lo único que mantiene a flote mi poca esperanza. Son aquellos que han tratado de seguir sus convicciones, pensamientos y creencias. Pero más importante aún, son los que enseñan con el EJEMPLO. No dan dos caras, son constantes y correctos. Te hacen ver las injusticias, te sugieren, te recomiendan, te ofrecen su amistad, te otorgan un respeto, te tratan como ser humano y sobretodo como un futuro compañero, no como otros que pareciera que ven en ti a la futura competencia que les impedirá ganar más dinero.
Estas maestras y maestros siguen ahí, luchando día a día contra la corriente provocado por los fuertes vientos gubernamentales. Por si leyera alguien esto y esa persona no fuera mexicana, viviera en otro país, solo quiero aclarar algo: Nuestro jefe inmediato en el estado, el Secretario de Educación, nunca ha estado frente a un grupo de alumnos en su vida. Es un administrador de empresas, no conoce nada de educación, no tiene presencia, educación y lo que es peor, se ha dejado llevar por las ideas de algunos "pseudo maestros" que le hacen creer lo que quieren para lograr con ello sus propios beneficios.
Espero salir algún día con mi título de esta escuela, pero sobretodo espero tener la oportunidad de llegar a ser un excelente "maestro", crítico de la sociedad en la que vivo, que le pueda ofrecer un conocimiento en verdad útil a mis alumnos, que no los limite, que les pueda otorgar alas para volar hasta destinos inimaginables. Que triste en sentir que entre más tiempo paso en la institución, más me pierdo en una nube de confusiones. ¿Dónde está aquel profe Carlos que se sentía inspirado en su secundaria, y al que los alumnos respetaban y en algunos casos hasta querían?. Hoy se viven nuevos tiempos en la escuela. Nuevas formas de ver la educación, a lo lejos se alcanza a ver una pequeña luz. Poco a poco parece que se camina hacia ella, desgraciadamente la nave lleva aún el peso de las maletas del barco anterior. Creo que en la vida, es necesario soltar el equipaje que resulte innecesario para viajar más cómodo y lograr más metas. Esta escuela cambiará, yo lo sé. Ahora que pienso en el título de esta entrada me dio un escalofrío y vaya que no lo hice con intención pero que tal si al mismo le quitamos una consonante, con tan solo una letra se podría regresar a la oscuridad.
¿Acabaré la escuela? Solo esperemos que no se cumpla el dicho aquel: "el pez por su boca muere". Porque dudo que algún día esta boca deje de gritar lo que piensa. No lo hice, nunca lo he hecho y nunca lo haré, es mi manera de ser, mi manera de vivir, y soportaré las consecuencias. Prefiero esto mil veces a tener que perder mi dignidad viviendo en la hipocrecía como tanta gente que se vende por unas cuantas monedas al mejor postor, sin importarle las consecuencias o a quien le destruyan la vida o lo que es peor (para mí), su imagen.
La verdad no se que es lo que pasa. En verdad que amo mi profesión. Siento un gran cariño y profundo respeto por ella y bajo este tenor siento terror al observar a las futuras generaciones de docentes que egresarán y desgraciadamente han egresado en los últimos años de esta institución. La gran mayoría autómatas. Cada semestre te llenan la mochila o el carro de paja y más paja. Antologías de más de 500 páginas por materia, las cuáles debes de leer y "analizar". ¿En verdad creen que con esto seremos buenos docentes? Ja, que engañados vivimos. Tenemos que cumplir con "ciertos requisitos" para llegar a tener un título como Lic. en Educación Secundaria. Pura y vulgar parafernalia. No se quieren dar cuenta que nuestros gobernantes no desean "maestros", lo que buscan son borregos destinados a la hoguera. Personas sin actitud, sin capacidad de réplica, que no se quejen, que soporten las injusticias, que sientan TEMOR de expresar sus opiniones, que no puedan defender su persona ante la opinión pública. ¿Para qué preparar docentes para la educación pública si esta está destinada a desaparecer?. Preferible que los futuros docentes sean callados y sumisos y en un futuro que esto llegue a suceder simplemente tomen su tabla y se dejen llevar, flotando plácidamente, por la corriente.
¿Saben? felicidades, lo están consiguiendo. Es triste, después de 9 años de trabajo frente a las aulas con nombramiento en la educación pública y algunos más fuera de ella, contabilizando un total de 12, observar como personas sin experiencia vienen a ofrecerte las tablas para ser un gran docente. No se pueden poner de acuerdo en las partes de un ensayo, no te saben explicar lo que es en verdad el constructivismo y además ni siquiera lo usan o lo confunden con "ahí les va la paja, expongan frente a grupo". Claro, no quiero ni busco generalizar. Siempre he tratado de diferenciar y separar lo bueno de lo malo. Hay maestros y maestras que valen la pena en esa escuela. Sus capacidades son lo único que mantiene a flote mi poca esperanza. Son aquellos que han tratado de seguir sus convicciones, pensamientos y creencias. Pero más importante aún, son los que enseñan con el EJEMPLO. No dan dos caras, son constantes y correctos. Te hacen ver las injusticias, te sugieren, te recomiendan, te ofrecen su amistad, te otorgan un respeto, te tratan como ser humano y sobretodo como un futuro compañero, no como otros que pareciera que ven en ti a la futura competencia que les impedirá ganar más dinero.
Estas maestras y maestros siguen ahí, luchando día a día contra la corriente provocado por los fuertes vientos gubernamentales. Por si leyera alguien esto y esa persona no fuera mexicana, viviera en otro país, solo quiero aclarar algo: Nuestro jefe inmediato en el estado, el Secretario de Educación, nunca ha estado frente a un grupo de alumnos en su vida. Es un administrador de empresas, no conoce nada de educación, no tiene presencia, educación y lo que es peor, se ha dejado llevar por las ideas de algunos "pseudo maestros" que le hacen creer lo que quieren para lograr con ello sus propios beneficios.
Espero salir algún día con mi título de esta escuela, pero sobretodo espero tener la oportunidad de llegar a ser un excelente "maestro", crítico de la sociedad en la que vivo, que le pueda ofrecer un conocimiento en verdad útil a mis alumnos, que no los limite, que les pueda otorgar alas para volar hasta destinos inimaginables. Que triste en sentir que entre más tiempo paso en la institución, más me pierdo en una nube de confusiones. ¿Dónde está aquel profe Carlos que se sentía inspirado en su secundaria, y al que los alumnos respetaban y en algunos casos hasta querían?. Hoy se viven nuevos tiempos en la escuela. Nuevas formas de ver la educación, a lo lejos se alcanza a ver una pequeña luz. Poco a poco parece que se camina hacia ella, desgraciadamente la nave lleva aún el peso de las maletas del barco anterior. Creo que en la vida, es necesario soltar el equipaje que resulte innecesario para viajar más cómodo y lograr más metas. Esta escuela cambiará, yo lo sé. Ahora que pienso en el título de esta entrada me dio un escalofrío y vaya que no lo hice con intención pero que tal si al mismo le quitamos una consonante, con tan solo una letra se podría regresar a la oscuridad.
¿Acabaré la escuela? Solo esperemos que no se cumpla el dicho aquel: "el pez por su boca muere". Porque dudo que algún día esta boca deje de gritar lo que piensa. No lo hice, nunca lo he hecho y nunca lo haré, es mi manera de ser, mi manera de vivir, y soportaré las consecuencias. Prefiero esto mil veces a tener que perder mi dignidad viviendo en la hipocrecía como tanta gente que se vende por unas cuantas monedas al mejor postor, sin importarle las consecuencias o a quien le destruyan la vida o lo que es peor (para mí), su imagen.
miércoles, 11 de marzo de 2009
Uno mas uno = uno
Cuando cuando lo conocí. Yo tenía 17 años, él solo 13 ¿o 14?. Caminaba al lado de mi mejor amigo, de mi hermano y me lo presentó, su nombre, Javier. Chaparrito y gordito, como de caricatura. Con una sonrisa, ¿cuál sonrisa?, con una carcajada destinada a cualquier situación de la vida, fuera buena o mala. Recuerdo las caminatas a la salida del Instituto Cultural, acompañando a nuestras amigas al camión y Pepe, por sentirse mayor lo sarandeaba en la cabeza, ahhh como le decía yo: no le pegues, va a crecer.
Y así fue, creció, pero lo hizo a nuestro lado, ofreciéndonos su amistad y su apoyo hasta convertirse en uno de mis más grandes y queridos amigos, y vaya que son muy pocos a los que considero así.
Y así fue, creció, pero lo hizo a nuestro lado, ofreciéndonos su amistad y su apoyo hasta convertirse en uno de mis más grandes y queridos amigos, y vaya que son muy pocos a los que considero así.
Estudiamos un tiempo juntos, pero no revueltos en el CUCEA, y en aquel tiempo se acercó a mí para contarme que ya tenía novia, que se llamaba Lily. Su cara solo reflejaba entusiasmo y emoción. Conocimos a la susodicha y para ser sinceros no fue buena la primera impresión. ¿Cómo lo iba a ser si nosotros representábamos el mejor sinónimo para patán?.
Así pasaron los años y el cariño y respeto por esta mujer creció en nosotros. Amaba a nuestro amigo y eso era lo importante, lo que valía la pena y lo que nos ganó.
Hace meses atrás Javier me dijo: Cano, me caso. Mi primera reacción quiso ser de sorpresa, como si fuera broma, pero si algo se de este hombre, es que no bromea para eso. Platicamos, me di cuenta que no llevaba poco tiempo de planearlo y a pesar de que muchas veces me imaginé diciéndole que no lo hiciera me dió un gusto enorme y no pude más que desearle suerte y felicitarlo por su atinada decisión. El tiempo pasó y la fecha anunciada llegó, 28 de febrero de 2009. El día en que los novios se hicieron esposos, en que aquél niño gordito y chaparrito se convirtió en hombre y lo hizo al lado de una gran mujer.
Pocas veces he escrito acerca del amor y menos aún del matrimonio, pero esta unión me ha hecho sentir deseos de dedicarles un pequeño párrafo más, anexo al que les di en su album de recuerdos.
Alguna vez escuche en alguna canción popera que uno mas uno es igual a uno cuando de amor se trata. Javier y Lily, ustedes cumplen esto a la perfección. El destino los unió y les dió la oportunidad de juntar sus vidas, de crear una familia propia y ustedes no la desaprovecharon. Se tomaron de la mano y dieron un gran paso en sus vidas. Un paso lleno de luz, de bendiciones, de buenos deseos, de sueños compartidos. Ya no nada más compartirán lo bueno, ahora deberán estar juntos también en lo malo, apoyándose, aconsejándose y por que no gritándose. Ahora el uno velará por el otro y dejarán el singular por un plural matrimonial. Ya la firma legal dió un paso atrás, la fiesta para los invitados y la sociedad quedó lejos. Hoy son Ustedes y lo seguirán siendo por muchos años. Cuiden ese amor, protejanlo ante todo, peleen por él. Aprendan y recuerden por siempre el término tolerancia, usenlo en sus vidas y amence. ¿Qué es el amor? no conozco una definición que me llene, pero al verlos creo poder entenderlo. Sus ojos al verse durante la boda, ese llanto que corrió discretamente, esa ilusión y esas manos que se apretaban mutuamente. Su expresión llena de esperanza, de felicidad por sentirse unidos para siempre. Amigos, felicidades, mucha luz, mucho amor en su vida. Mi cariño es de ustedes y mi admiración perpetua, pase lo que pase.
Ahora, solo unas fotos del evento.
Ofreciéndo sus almas el uno al otro

Los nervios no dejaban a Javier y prefirió reir que llorar en la misa
¿Quién creería tanta seriedad?
Si esto no es felicidad no se lo que sea
Su servidor con los novios en el templo Mi hermano Pepe y su novia y futura esposa Cindy
Mis amigos Pedro Enrique y Susy Nuestra amiga Samantha y su novio
Y para finalizar, Jessy y su servidor con la feliz pareja
¿Algún día será al revés? Esperemos
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